La apuesta de la petrolera por la energía verde es firme, y estos nuevos planes de inversión en renovables son el reflejo de esta apuesta. El objetivo de Shell es claro: convertirse en uno de los principales actores del mercado energético español, tanto en la producción como en la distribución de energía verde.
En esta dura pugna entre empresas energéticas, muchas serán las variables que determinen qué compañía se posicionará como líder en el mercado de la energía renovable. Desde el ritmo de inversión hasta la eficiencia en la producción y en distribución. De momento, Shell se encuentra en una posición notablemente avanzada en términos de inversión, aunque aún tiene un largo camino por recorrer si quiere mantenerse a la altura de las grandes del sector.
En cualquier caso, esta lucha no hace más que reflejar un hecho innegable: la energía renovable es el futuro. La demanda de energía renovable está en constante crecimiento, y las empresas que deseen liderar el mercado energético en el futuro deberán luchar por hacerse con una posición privilegiada en este sector.
La apuesta por la energía renovable no solo es una estrategia a largo plazo para afrontar los nuevos retos medioambientales, sino también una forma de asegurar la sostenibilidad financiera de las compañías en el futuro. Las empresas que se adapten a las nuevas demandas de los consumidores, y apuesten por la innovación y la sostenibilidad en sus modelos de negocio, serán las que lideren el mercado en los próximos años.