«BBVA tropieza tras elecciones turcas»

BBVA se enfrenta a un nuevo revés en la Bolsa, perdiendo medio punto porcentual, tras conocerse el resultado de las elecciones en Turquía. El presidente turco, Recep Tayip Erdogan, ha revalidado su mandato, lo que ha tenido consecuencias para la cotización de la lira turca. Actualmente, la divisa ha registrado un descenso del 0,3%, lo que ha aumentado el temor en el sector financiero. Los analistas de Bankinter consideran que esto es una mala noticia para BBVA a corto plazo.

BBVA tiene presencia en Turquía a través de Garanti, su filial turca, lo que ha generado el 11% de los ingresos del grupo en el primer trimestre del año y el 15% en cuanto al beneficio neto ordinario. La situación en Turquía es preocupante, ya que la inflación ha alcanzado el 43% y el Banco de Turquía ha conservado los tipos de interés en el 8,5%, lo que dificulta la reducción de los precios.

Los expertos de Morgan Stanley están en contra de la política económica de Erdogan, previendo que la lira se desplome hasta final de año un 29%. Explican que los niveles de inflación tan altos no se pueden combatir con unos tipos de interés tan bajos, ya que esto aumentará la sensibilidad a los golpes globales y mantendrá vivos los riesgos macro.

El estratega de Tellimer en Dubái, Hasnain Malik, asegura que la reelección de Erdogan «no ofrece ninguna comodidad para los inversores extranjeros». Advierte que el país se enfrenta a una situación delicada, con una inflación muy alta, tipos de interés muy bajos y sin reservas extranjeras, por lo que estaría en camino «una crisis dolorosa» que afectaría a todos los activos. De hecho, los analistas no descartan un cambio de rumbo en las políticas de Erdogan para lograr un cambio positivo.

A pesar de lo sucedido en Turquía, Deutsche Bank considera que el valor del banco sigue siendo muy sólido y los analistas de Bankinter aprecian factores positivos a tener en cuenta. En principio, lo ocurrido en Turquía no debería causar excesivos problemas al BBVA. Los expertos sostienen que «esto no debería ser un impedimento para los inversores que están posicionados en BBVA a largo plazo».

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