El verano es una época del año en la que se registran un aumento significativo de desplazamientos en carretera, ya sea por vacaciones, escapadas o visitas familiares. Sin embargo, este incremento de tráfico viene acompañado de malos hábitos al volante que pueden poner en peligro tanto a los conductores como a terceros.
Mal hábito común detectado
A lo largo de los últimos años, la Guardia Civil ha observado un mal hábito que se repite con frecuencia entre los conductores durante los meses más calurosos del año. A través de sus redes sociales, han querido alertar sobre esta práctica que puede desencadenar situaciones de peligro grave en la carretera.
Utilizar el teléfono móvil mientras se conduce
El mal hábito del que se habla es el uso del teléfono móvil mientras se conduce. Esta distracción es una de las principales causas de accidentes de tráfico en todo el mundo, y durante el verano parece incrementarse debido a la necesidad de informarse sobre rutas, utilizar aplicaciones de navegación o simplemente estar conectados a las redes sociales.
Factores de peligro
El uso del teléfono móvil al volante aumenta significativamente el tiempo de reacción del conductor, disminuye la atención en la carretera y, en muchos casos, implica apartar la vista del camino para poder leer o responder un mensaje o realizar una llamada.
Este mal hábito se convierte en una actividad de alto riesgo en situaciones de tráfico intenso, obras viales o en carreteras con alta velocidad, ya que una mínima distracción puede provocar colisiones graves o atropellos.
Consecuencias legales
La utilización del teléfono móvil mientras se conduce está penada por la legislación de tráfico en la mayoría de los países. En España, por ejemplo, esta infracción está considerada como una falta grave y puede suponer una sanción económica y la pérdida de puntos en el carné de conducir.
Recomendaciones de la Guardia Civil
Para evitar situaciones de peligro y cumplir con la normativa vial, la Guardia Civil ofrece las siguientes recomendaciones:
- Evitar el uso del teléfono móvil: En la medida de lo posible, es aconsejable no utilizar el teléfono móvil mientras se está conduciendo. Si es necesario, es recomendable hacer una parada segura en el arcén o en una zona de descanso para realizar las llamadas o usar aplicaciones.
- Utilizar sistemas de manos libres: Si es imprescindible responder una llamada, es preferible utilizar sistemas de manos libres, como el reconocimiento de voz del vehículo o un auricular inalámbrico.
- Programar el GPS antes de iniciar el viaje: Si se va a utilizar un sistema de navegación, es importante programarlo antes de emprender el viaje y no manipularlo durante la ruta.
- Concientizar a los pasajeros: Si se viaja en compañía, es importante concienciar a los pasajeros sobre la importancia de no distraer al conductor con llamadas o mensajes que puedan interferir en su atención a la carretera.
En conclusión, el mal hábito de utilizar el teléfono móvil mientras se conduce puede generar situaciones de peligro grave en la carretera. Por ello, es fundamental concienciar a los conductores sobre los riesgos que conlleva esta práctica y adoptar medidas para evitar su uso mientras se está al volante. La responsabilidad y el respeto a las normas de tráfico son fundamentales para garantizar la seguridad vial durante los desplazamientos en verano.